![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj82GvKm6UzuKoMxramjGb_DM850FKS48A9H1ve6qPVEdJoEiwtTi-KbTZE5J_CnNUV16GvcBGxC95HnI_FcYpz5-JB1t5jfiPSsDKEHD4Dp2MQG_7Y1QXH_l4GwkIhsbOkRce4Mr835sI/s400/Finish_Certificate.jpg)
![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEja_IT1GkrzMVuusZCfazMzklWeY8rFQSMhY5M1LNLhkGMChuatRw-v7EvGt14QO5e6aWK9TALdOM_KBBlQl5xYCX0Jm2BccJbu3cIgSqZqRxWU8OepBJeVYrvU94M2XWhvrirr-gAw3NI/s400/FELIX+SANCHEZ+Copyright+%C2%A9_105.jpg)
Hace no mucho tiempo (8 de Noviembre) en una ciudad no muy lejana, unos valientes desafiaron a las inclemencias meteorológicas y se embarcaron en una batalla que no puede sino calificarse como memorable y épica.
Partieron de Behobia 15.000 hombres y mujeres armados con sus zapatillas y algún que otro chubasquero (que no serviría sino para sudar más). Las tropas de Eolo azotaban fuerte pero aún así no se rindieron, pocos se quedaron por el camino, pero muchos más fueron los que alcanzaron su objetivo, no ahogarse, y llegar al Boulevard donostiarra.
Apostados a ambos lados de la carretera les esperaba un público que no paro de animarlos durante su duro peregrinaje.
Sirvan estas líneas como homenaje a todos: público y corredores.
Partieron de Behobia 15.000 hombres y mujeres armados con sus zapatillas y algún que otro chubasquero (que no serviría sino para sudar más). Las tropas de Eolo azotaban fuerte pero aún así no se rindieron, pocos se quedaron por el camino, pero muchos más fueron los que alcanzaron su objetivo, no ahogarse, y llegar al Boulevard donostiarra.
Apostados a ambos lados de la carretera les esperaba un público que no paro de animarlos durante su duro peregrinaje.
Sirvan estas líneas como homenaje a todos: público y corredores.
No hay comentarios:
Publicar un comentario